Ya que he visto por ahí una referencia a cierto desayuno de un sábado por la mañana que ya casi habia olvidado, se me ha ocurrido inaugurar este blog (y ya llevo tres, a este paso me voy a tener que dedicar a esto profesionalmente) con la receta del desayuno que tanto gustó a Barrera.
Lo llama Javier tostadas aljarafeñas y así se puede llamar. En cualquier caso no es un invento propio, sino que debo haberlo visto en algún sitio, aparte de que mi padre suele hacer algo parecido, aunque más tosco.
Se coge el pan y se tuesta en el horno. Yo prefiero el horno porque quita mucha agua al pan y eso hace que luego se hidrate la tostada fácilmente con lo que le vamos a echar.
Una vez tostado el pan se le echa aceite de oliva virgen extra, oporto (o un buen vino dulce) y miel. Al gusto se le puede poner un poquito de canela en polvo si se quiere.
Como se puede ver es casi una torrija y no es apto para menores a no se que se pretenda que el niño empiece el día un poquito atorrijado.
Está claro que la miel va a final y lo que no tengo todavía definido es si poner primero el vino y luego el aceite o viceversa. Si se pone el vino el pan lo absorbe y luego no queda absorción suficiente para el aceite. Si se comienza con el aceite, el vino no pasa la capa creada por el virgen extra. Para evitar el problema voy echando un poco de cada hasta que gotea por abajo, la miel y a comer.
Lo suyo es tomar las tostadas con café y un zumo de naranja.
Y hasta aquí el desayuno y mi primer post en Periodismo al Pil Pil.
Un buen desayuno, para empezar...
22 de mayo de 2007
Publicado por Unknown en 5:41 p. m.
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
1 comentarios:
Mmmmmmmmmm. Me lo pido para este sábado por la mañana!!
Publicar un comentario